sábado, 13 de octubre de 2007

Siem Reap

Ayer despues de pasear por Phnom Penh cenamos en el primer sitio que no nos ha gustado de Camboya, un chino/camboyano recomendado en la Lonely que no nos gusto nada la comida (probablemente no acertamos con lo que pedimos) que estaba lleno de turistas (mala senal) y que nos costo el doble que cualquier comida o cena que hayamos hecho en este viaje, eso si, terraza con vistas al rio, y tratamiento de turista asegurado :-(
Por cierto que en Wat Phnom me llamo la atencion que el parque estaba lleno de monos y vendian comida para dar a los monos igual que en Espana les damos a las palomas...
Esta manana a las seis despertador grrrr
a las seis y veinte desayunando y a las siete menos veinte en el embarcadero...
A las siete en punto salia el barco, en la Lonely ponia que vendian muchos mas asientos de los que habia pero no era el caso de nuestro barco, los asientos estan numerados y eramos menos personas que asientos aunque estamos en octubre y quizas en otras epocas del ano este mucho mas masificado... al principio en el barco nos hemos puesto fuera en la parte delantera donde el barco va rompiendo la corriente, el aire te va acariciando la cara aunque estaba nublado y acababas teniendo frio habia una sensacion de paz y tranquilidad.
Sobre el rio cientos de pequenos grupos de nenufares flotan en el agua como restos de un naufragio, el barco pasa sobre ellos como si no los rozara, a ambos lados de la orilla se suceden las aldeas, las casas sostenidas sobre troncos en el agua, las canoas, los ninos banandose, los pescadores...
cuando el rio se convierte en lago parece el mar, a un lado y a otro nada en el horizonte.
Hemos entrado en la parte de abajo donde estan los asientos a recuperar la temperatura corporal y cuando ha salido el sol ya nos hemos puesto sobre el techo de la cabina en el barco.
Una sensacion magica, el aire, el sol sobre la cara, tumbados sobre la cubierta con la cabeza apoyada en la mochila... por supuesto y a pesar del protector solar algo nos hemos quemado, pero el viaje ha merecido muchisimo la pena.
La llegada ha sido preciosa, en la aldea flotante donde las casas y los barcos se confunden... una vez recuperada la mochila grande de la bodega del barco hemos localizado enseguida un taxi que el hotel ha enviado a buscarnos, hemos atravesado Siem Reap y hemos llegado al Palm Village hotel.
Este hotel esta formado por pequenas cabanas de madera en medio de un paraje selvatico, es precioso pero un poco aislado, bueno increiblemente aislado, necesitamos un tuctuc para ir a cualquier sitio y como aqui no hay mas tuctuc que el del hotel te cobran 3 dolares. En el hotel nos ofrecen el tuctuc a 12 dolares el dia, asi que aqui estamos dudando si nos vamos al pueblo a negociar o si nos quedamos con la oferta un poco mas cara pero mas comoda del hotel, la duda de siempre...
Acabamos de comer en el hotel, los precios son bastante ajustados y estamos molidos para ir a la busqueda y captura de un sitio mas economico, aqui se esta bien :-)
Manana primer contacto con Angkor, punto culminante de nuestro viaje

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Me parece muy romántico todo lo que describes, muy poético. La verdad es que dan unas ganas horrorosas de salir corriendo y aparecer alli...

Anónimo dijo...

que envidia para las que nos quedamos en valencia currando :-(